Lo más increíble era que no recionocíamos qué animal era el que estaba al lado del camino, se veía quemado, ya el pelo no estaba, las moscas y otros insectos que estaban en él indicaban que estaba en su momento de descomposición, claro, no fué totalmente quemado, por la dentadura, despues y analizando su ocico vimos que era un perro, que seguramente lo atropellaron y fue a àrara cualquiera de las quemas de basura que a diario se hacen a orillas de caminos en este y otros pueblos, que generalmente se convirtieron en basureros.
Las historias que cuente, mientras esté en El Cerrito, mi pueblo, una ciudad que tiene muy poco de ciudad y muy poco de cariño! :P
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